Viaje por carretera a Eslovaquia – Un pequeño país con muchas facetas
Bratislava -Capital animada
El viaje comienza en Bratislava, la capital del país. Algo más de 400.000 habitantes viven en la metrópoli. Esto convierte a Bratislava en una capital pequeña, pero de todo menos somnolienta. Le espera una metrópolis vibrante, donde el pasado y el presente se complementan armoniosamente. Comience su recorrido en la Puerta de Miguel. Aquí se encontrará frente a la única puerta de la ciudad que se conserva en Bratislava. La puerta se menciona por primera vez en un documento de 1411, pero la torre barroca, que da la cara a la Puerta de Miguel, se construyó entre 1753 y 1758.
El recorrido continúa hasta la Iglesia de Isabel la Azul. Se construyó en 1908 y se considera un ejemplo de Art Nouveau. Ahora debes visitar el Palacio de Mirbach. Se construyó entre 1768 y 1770 e impresiona tanto por su fachada rococó como por su magnífico interior. Un paseo por la zona peatonal Michalská concluirá la visita turística. Siéntese en un “café vienés”, observe a los lugareños haciendo sus compras y disfrute del ambiente relajado pero animado de la ciudad.
Nitra – Descubre la ciudad más antigua de Eslovaquia
Continúe su viaje hacia Nitra, la ciudad más antigua de Eslovaquia. La primera iglesia se consagró aquí ya en el año 829. Primero visita el castillo. Se construyó en el siglo XI. Sin embargo, en 1663, grandes partes fueron destruidas durante un ataque turco. Las partes más nuevas del castillo se añadieron durante los periodos renacentista y barroco.
No deje de visitar la Catedral de San Emmeram, situada dentro del complejo del castillo. Merece la pena ver el magnífico altar de mármol, creado en 1622. Después, si no hace demasiado calor, se puede subir a la montaña local de Nitra, el Zobor. Tiene 588 metros de altura y ofrece una hermosa vista de los alrededores. Si no le apetece hacer senderismo, también puede tomar un teleférico hasta la cima.
Banska Bystrica – Quizás el lugar más bello del país
Banska Bystrica es el punto final de este viaje por carretera. Aquí, el pintoresco casco antiguo, con sus numerosas tiendecitas, cafés y restaurantes, resulta especialmente encantador. En primer lugar, visite la plaza del mercado, flanqueada por magníficos edificios antiguos. No dejes de subir a la torre del reloj, que data de 1552. Desde aquí se tiene una hermosa vista sobre la plaza del mercado y la ciudad. La iglesia de Santa María, situada dentro del recinto del castillo, también merece una visita. Las partes más antiguas datan de 1255.
Si tiene hambre, le recomendamos el restaurante Slovenská pivnica. Aquí podrá degustar la cocina eslovaca en su máxima expresión. Tampoco faltan buenos hoteles en Banska Bystrica. En el Hotel Arcade se alojará en un antiguo edificio del siglo XVI y disfrutará de las comodidades de los tiempos modernos.